El voto de los de afuera
Para los españoles que residimos en
el exterior las próximas elecciones generales vienen marcadas por la presencia
del conocido ‘voto rogado’. El voto rogado quiere decir que, en lugar de
recibir la documentación electoral en nuestros domicilios como sucedía hasta el
2011, los votantes españoles que residimos fuera de España y queremos ejercer el
derecho al voto debemos solicitar previamente la documentación en las oficinas
consulares de la circunscripción consular a la que pertenecemos.
La implantación del voto rogado
ha provocado una enorme caída en el
número de votos emitidos desde el extranjero y ha suscitado las críticas
de muchos de nosotros en el exterior ya que hace más difícil y obstaculiza la posibilidad
de participar en las elecciones, ya sean estas generales o autonómicas. La participación de los que nos encontramos
en el exterior ha caído de una media
del 30% en las elecciones anteriores al 2011 al 3% o 4% en todas las elecciones
(generales y autonómicas) desde entonces.
Las deficiencias, dificultades y
problemas con los que nos topamos desde que nos impusieron el voto rogado son
bastante numerosas. Uno de los problemas
más frecuentes es que los documentos no llegan a tiempo. Otro es la relativa complejidad del proceso;
rellenar formularios, incluir fotocopias de documentos identificativos,
certificar las cartas. Otro es el acceso
a las oficinas consulares, etc. etc.
¿Por qué no podemos volver al
sistema anterior, es decir, que todos recibamos de oficio toda la documentación
con la antelación necesaria? ¿Por qué no
podemos mantener la igualdad con los ciudadanos de adentro? Muchos de nosotros pagamos impuestos dentro
de España, visitamos el país y nos gastamos nuestros ahorros en España. Volvemos y nos afincamos de nuevo en España. Muchos de nuestros hijos y nietos van a estudiar a España
y algunos terminan afincándose en España.
No nos apartéis de nuestro país.
El voto no es un privilegio es un
derecho del ciudadano, esté dentro o fuera del país.
CRE de Canberra
